No nos engañemos: ¡las bodas nos encantan!. Es el día perfecto para disfrutar con la familia y los amigos, comer bien y disfrutar de la fiesta. Pero también para lucir nuestras mejores galas.
Y aunque los protocolos se han ido relajando durante los últimos años, no está de más que repasemos esas normas no escritas a la hora de escoger modelito para una boda.
En este post voy a contarte algunas de ellas. Seguro que muchas ya las conoces pero espero sorprenderte con alguna. ¡Sígueme!
Consejos para ir bien vestida a una boda
Dress code o código de vestimenta
No se si lo sabías pero, en algunas ocasiones, los novios mencionan en su invitación una especie de código de vestimenta o dress code para orientar a sus invitados. Por ejemplo, si la boda es temática debes seguir esas indicaciones. No es lo mismo una boda ibicenca, donde debemos ir de blanco o con tonos claros, que una boda con protocolo donde las invitadas deben ir de largo o llevar tocado.

Boda de verano o invierno
Por supuesto, la época del año nos condiciona a la hora de vestir. En invierno predominan las capas, las estolas, y los abrigos. También chaquetas y toreras. Siempre con tejidos cálidos como el radio o el satén.

Sin embargo, en verano los vestidos son vaporosos, con escotes y brazos y espaldas al aire. Tenemos que lucir bronceado y presumir de curvas.

Boda religiosa o civil
Tradicionalmente las bodas religiosas eran más pomposas y las civiles más sencillas. Por fortuna, todo esto ha cambiado. Aún así, las bodas civiles suelen ser más desenfadadas y con menos protocolo. Hay más posibilidades a la hora de escoger una prenda más informal que en el caso de la boda religiosa, que está más sujeta al protocolo.

Boda de mañana o boda de tarde
Si la boda es de día podemos elegir colores vivos o pastel. El vestido corto es el más adecuado siempre que no seas la madrina o una de las damas de honor. En estos casos, o si eres hermana de alguno de los novios, te puedes saltar el protocolo e ir de largo.

En una boda de tarde, el vestido largo… ¡triunfa!.
También son tendencia los vestidos tobilleros, los monos y los trajes chaqueta. Y si quieres apostar por lo seguro…¡el negro es tu color!.
El blanco, por supuesto, se lo dejamos a la novia.
Los complementos
El zapato de tacón alto es el rey. Sin embargo, cuando elegimos un tacón muy exagerado a las dos horas estamos por tirarlos en la primera esquina. Por lo que no está de más llevar unos zapatos planos para cambiarte. Ya en muchas bodas, ofrecen como detalle a las invitadas, unas alpargatas. ¡Biennnnn!
El bolso, siempre de tamaño pequeño, te da ese aire sofisticado que tanto te gusta. El único inconveniente es que sólo te cogerá el pintalabios y el rímel. ¡No todo es perfecto!
En bodas de mañana, se ven mucho los tocados. Tanto las Pamelas, como las diademas o coronas. Sin embargo, no pienses en ello si la boda es de noche. En ese caso, opta por un peinado que haga lucir tu pelo y tu rostro. Un recogido siempre te da ese aire sofisticado.
Y como último consejo te recomiendo que optes por la sencillez. No caigas en la tentación de cargar tu “look” con muchos abalorios y complementos.
Lo importante es que te sientas guapa y elegante con ese vestido que te ha enamorado. Y siempre sintiéndote tu misma.
Y ya sabes… ¡chin chin!










